Desafíos casi extremos...

Quien tenga un trabajo de 9:00 a 19:00, vacaciones convencionales en agosto y navidades, y niños pequeños seguro que me comprende. No son para nada desafíos extremos, pero son las típicas salidas a la sierra de las que te sientes bastante satisfecho o cualquier "chorrada" del estilo. Pues eso, mi idea es intentar colgar aquí salidas de ese tipo, aunque se dilaten bastante.

Ruta Imperial - MTB (28-10-2012): Crónica de la ruta

Subida a El Calvitero - Canchal de la Ceja - El Torreón (09-12-2011)

Para un madrileño como yo, el primer ejemplo de desafío extremo podría ser la subida al pico más alto de la Comunidad de Madrid: el mítico Peñalara (2.428 metros). No es que sea muy extremo pero por algo tendríamos que empezar, y además forma parte del “ambicioso proyecto”, que completaré más tarde o más temprano (hay toda una vida por delante) de subir a las cimas más altas de las comunidades autónomas de España.

Sin embargo, la primera ocasión que se me ha presentado es la subida al pico más alto de Extremadura; El Torreón (2.401 metros). Además aderezado con la subida a El Canchal de la Ceja (2.427 metros), la cota más alta de Salamanca. Tampoco está mal, para alguien con ascendencia cacereña y salmantina como yo.

A las 9:00 de la mañana llegamos a la Plataforma. Allí hay un bar/hotel y un parking bastante grande, pero es conveniente pasar de largo y continuar por la carretera que continua unos 3 kms más y que termina en otro aparcamiento más pequeño desde el que sale realmente el camino de ascensión al Calvitero, que será nuestra primera parada.

Mi hermano Nacho en los primeros compases.
No es fácil localizarlo porque el camino arranca siendo un pequeño sendero en la zona de entrada al aparcamiento. Una vez tomamos ese sendero, se inicia una subida bastante "a lo bonzo", que sube bastante directa con pocos rodeos y con una pendiente que para ser en la primera hora al bajarse del coche, podemos considerarla "pestosa". Además tampoco es que el camino sea muy claro; hay muchos mojones indicando el camino, con lo que no nos perdemos en ningún momento, pero a veces da la impresión de que más que camino hay senderos poco claros por los que sube y baja cada uno a su antojo.

Subimos con poca nieve al principio, aunque según vamos ascendiendo comienza a aparecer. No es que haya mucha, pero la poca que hay está helada en muchos tramos. ¡Y nosotros sin crampones! Al menos tenemos los bastones para agarrarnos como podemos.

Remontamos la ladera que sale del aparcamiento y tenemos el Calvitero a nuestra derecha. Las vistas son espectaculares. Tenemos enfrente el macizo central de Gredos (Almanzor y demás), y más a la derecha el macizo occidental (La Covacha y demás). Nos separa el valle del Aravalle y del Jerte, pero seguimos a por nuestro objetivo.
Macizo central de Gredos (al fondo) y occidental (al fondo a la derecha)


Primera cumbre conseguida
El Calvitero (2.401 m)
En 1 hora y 30 minutos llegamos a la cima del Calvitero. Es una cumbre muy fácil, salir del aparcamiento y remontar la ladera; sin valles intermedios, ni nada parecido. No es una cumbre muy clara, es una loma (de 2.401 metros, pero con aspecto de loma)

Nacho en la cima del Calvitero. Al fondo Gredos.
Nos paramos solo para hacernos las fotos de rigor. Hay que inmortalizar la primera de las 17 excursiones a por las cimas más altas de cada comunidad autónoma.

Más a la derecha tenemos el Canchal de la Ceja. La cota más alta de Salamanca. No digo pico más alto, porque tampoco es eso, es... bueno, una elevación del terreno, pero de pico nada de nada.

Nos dirigimos hacia allí. El Canchal de la Ceja se aborda por su parte norte. Esto es un pequeño problema para incautos como nosotros sin crampones. A esa hora (11:00) la nieve está bastante helada. Mis botas son de coña, unas Hi-Tec de las baratas, aunque pensándolo bien desconozco si Hi-Tec tiene caras :-). Están razonables para verano, pero en invierno son... vamos a llamarlas "ajustadillas". Me resbalo constantemente como un perro mientras intentamos subir al Canchal. Gracias a Dios, a los bastones, y a mi hermano que tiene unas cojo-botas con las que "talla" pequeños apoyos en las zonas heladas conseguimos remontar. Nos cuesta bastante más porque la subida es muy lenta entre resbalones y buscando las mejores zonas.

Camino del Canchal de la Ceja, antes de llegar a la zona helada.

El Canchal de la Ceja (2.425 m)
En el Canchal de la Ceja
Sobre las 11:15 llegamos a la cima. Segunda cota conseguida, y ésta además con el aliciente de ser la más alta de Salamanca!!! Hombre. no es el Himalaya o el Karakorum, pero menos es nada...


Aún nos queda un buen trecho por recorrer. El principal objetivo de la excursión es El Torreón. Hemos venido a subir a el pico más alto de Extremadura, y a por él nos vamos. Este tramo al Canchal nos ha hecho dudar. No llevamos crampones y si la nieve se pone peor, no sé si podremos pasar. Tenemos entendido que cerca de la cima hay un paso un poco delicado, y la verdad es que no hemos venido nada preparados.

El Torreón al fondo desde la base del Canchal de la Ceja.
La aproximación no tiene mala pinta, pero tras 20 minutos la cosa se empieza a poner un poco delicada. La nieve está helada y el camino pasa cerca de canales por las que si resbalas te recogen en el fondo. En verano no es problemático, pero en invierno y con estas pintas... Vamos con una prudencia extrema; en mi caso incluso podríamos decir que en algunos pasos voy un poco cagado. Como digo mis Hi-Tec tienen menos agarre que mis zapatos de vestir, bueno al menos no son muy frías...

Aprovecho las pequeñas piedras que de vez en cuando aparecen para pisar sobre seguro. Otra vez volvemos a acordarnos de los crampones. Menos mal que a última hora metí los bastones!!

Finalmente llegamos al paso delicado. Es una mole de piedra que hay que rodear. Nos asomamos a la derecha donde se ve un cable para asegurarse. Naturalmente nos da igual porque no traemos nada para asegurarnos, pero tampoco valdría de nada porque solo se ve un metro de cable. El resto lo tapa la nieve. Joder!! no vamos a poder subir, y ocasiones así (salidas a la sierra) son "rara avis" y no se deben desperdiciar. Bueno, como dicen los de Al Filo de lo Imposible, lo importante es volver.

En cualquier caso nos asomamos al lado izquierdo y ¡perfecto! aquí se ve una cadena. Casi no tiene nieve (claro, es la vertiente sur) y la bajada parece sencilla, así que plegamos los bastones y bajamos por la cadena.

Fotos de la cadena. No es nada complejo pero las ponemos porque son de urbanita "flipado" en campamento de verano... somos conscientes y nos hemos descojonado ya de ello.
Pasado este tramo, se llega con muy poco esfuerzo a El Torreón. Hemos llegado hasta aquí en 3 horas. Y me pregunto... ¿pero quien se ha encargado de subir estas piedras? Joder, si han retocado hasta las esquinas... Madre mía, esto parece un montaje, si ahora encuentro una parada de autobús me desarman mis esquemas... ¿dónde está la barra y el menú del día?

Desafío conseguido!!! En la cima de El Torreón (2.401 m)
La vuelta se hace por el mismo sitio en 2 horas. Perfecto, a la hora de comer en casa. Pero antes... pues claro, tomemos un aperitivo... ¿y qué más típico de Salamanca, y en concreto de Candelario, que el HORNAZO?


Por cierto... ahora que me veo comiendo hornazo con esa pinta... nunca uséis gafas de montar en bici en la nieve, se me quedaron los ojos como si me los hubieran lijado... bueno, se me emplea por cutre...

Os dejo el trazado seguido y el perfil... que se note que llevo GPS!!

Y por supuesto el track: Calvitero; Canchal de la Ceja; Torreón

Trazado seguido (Calvitero - Canchal de la Ceja - El Torreón)

Perfil del recorrido


3 comentarios:

  1. ¡¡¡Uff sois unos máquinas!!!. Sobretodo el tío ese que aparece colgado de la cadena en el vacío. Se ve que la actividad es muy técnica; que requiere de una buena cabeza (de esa veo que os sobra) y una condición física de bombero.

    Enhorabuena por el reportaje.

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  2. Y hay que tener en cuenta la altura y la carencia de oxígeno. 2400 metros, ¡de locos!

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  3. Quiero felicitarles por esta nueva vía que han aportado a la Comunidad. Me parece impresionante, no recuerdo expediciones parecidas desde hace mucho años,desde la época de los hermanos Duroff. Lástima que la sociedad se deshiciera tan pronto por retirada prematura de uno de los hermanos. En fin, es un placer ver que las nuevas generaciones toman el relevo.

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